Ayer,

          me desprendí,

 del último gajo que me quedaba de amor.

Ayer,

           Intente,

                        morir en ella,

ahogarme,

y…

chupe mi asfixia.

Ayer,

mi pecho,

                me succiono el aire

y mi corazón saltó.

No pude calmar mis ojos,

no pude hacer muelles o cubrirlos,

se rompieron tanto,

que me llovieron vidrios.

Y una niña salió de ahí,

una que también se lanzó.

Ayer, entendí porque vivía

ayer volví a sentir que moría.

Ayer,

          se me acabó el suspiro,

           y aspiré lo que pude.

Ayer despegó noviembre,

y se fue septiembre

, también,

Abril fue mi puente.

Desnude ese lugarcito,

que nos hace,

ocultarnos de día

y despertarnos de noche.

Me detuve un instante,

recorrí el mundo,

agarré un bote,

me senté,

te escuche sonrojarte.

Ayer,

la glándula, a solas,

me delató.

Maldita sea!,

caudal en vigilia.

Una belleza,

murió dulce. 

Estuve muda,

                       llamé al cosmos,

escale,  irremediablemente,

no eras tú y ni siquiera él,

no era io ni tampoco ella.

Ayer, te miré

espere 5 mil años

mis venas descarrilaron,

algún duende brincaba.

Morí, viví y solté,

El último gajo de amor.

Ayer,

         abrace tu beso,

sentí tus cuerdas,

abrigue tu tiempo,

brillo tu boca,

Y…

apague el mundo,

chupe tus colores.

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